¿Serán los centros comerciales cosa del pasado?
Bogotá. Los centros comerciales están en una carrera de reinventarse ante el inminente crecimiento del comercio electrónico. O eso parece indicar el rumbo que están tomando estos espacios de comercio tradicional.
Los centros comerciales cerraron este 2024 con crecimiento muy moderado de apenas el 0,5% respecto a 2023, y con una reducción del tráfico del 4,7%. Así lo informa Follow Up en su reciente estudio.
Por su lado, los comercios electrónicos siguieron creciendo. Las ventas en línea registraron un valor de COP 21,04 billones, un incremento del 10,4 % en comparación con 2023-II y un aumento del 0,9 % respecto a 2024-I, según reportó la Cámara Colombiana del Comercio Electrónico.
“El crecimiento del e-commerce ha tenido un impacto significativo en la afluencia y dinámica de los centros comerciales”, señala Alejandro Alegret, profesor de marketing en EAE Business School. “Este fenómeno refleja la necesidad de una constante evolución en este sector para adaptarse a los cambios en los hábitos de compra de los consumidores”.
Tecnología y experiencias, las nuevas estrategias de los centros comerciales
La Inteligencia Artificial y las experiencias phygital han permitido explorar nuevas dinámicas más allá de la compra presencial. Según lo explica el experto de EAE Business School, la personalización ha calado en las audiencias, especialmente la Gen Z, con opciones como el “Click & Collect”, que permite comprar online y recoger en tienda, además de otras actividades diferentes a la compra de productos.
“Se espera que se conviertan en lugares de vida y destinos vibrantes, inclusivos y multifuncionales que enriquezcan la vida de la comunidad”, detalla el experto. “La creación de experiencias multifuncionales, como la integración de espacios de entretenimiento, eventos culturales, áreas verdes y zonas de coworking, serán fundamentales para su relevancia futura”.
La supervivencia de los centros comerciales
Existen factores económicos, tecnológicos y culturales que pueden determinar que estos epicentros del comercio retail sigan vigentes, especialmente ahora con la aparición de nuevos complejos a lo largo del país.
“Desde el punto de vista económico, las tasas de interés, la inflación y el crecimiento económico global y nacional influirán en la demanda de productos y servicios”, indica Alejandro Alegret. Tecnológicamente, la rápida evolución de innovaciones como la inteligencia artificial y la automatización transformará las operaciones empresariales y la experiencia del cliente.
Además, el factor cultural también determinará la ruta que siga este sector: cambios en los valores sociales, preferencias de consumo y dinámicas sociales influirán, inevitablemente, en la demanda de productos y servicios. Aquí es donde los centros comerciales deberán estar muy atentos para poder adaptarse, evolucionar y mantener su rol en la economía local.