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San Andrés Isla, Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina. La gastronomía de San Andrés está viviendo un nuevo impulso gracias al trabajo conjunto entre el sector hotelero, ProColombia y ministerio de Comercio, Industria y Turismo. Esta articulación ha permitido acompañar a los establecimientos del archipiélago en su posicionamiento internacional. Con propuestas que integran tradición, sostenibilidad e ingredientes autóctonos, hoteles como Aquamare y Sol Caribe Campo están elevando la experiencia turística y fortaleciendo la identidad cultural isleña.

Con el lanzamiento de nuevas propuestas culinarias elaboradas a partir de productos autóctonos, estos hoteles de San Andrés están impulsando una transformación en la oferta gastronómica de la isla. Estas propuestas integran el trabajo conjunto con pescadores, agricultores y cocineros locales, en un esfuerzo por vincular la tradición culinaria isleña con prácticas sostenibles y experiencias turísticas de mayor valor.

Sabores de la isla: identidad y turismo en un mismo plato

Aquamare nació a partir de una necesidad identificada por una familia con amplia trayectoria en el comercio de San Andrés, que evidenció la oportunidad de fortalecer la oferta de restaurantes tradicionales isleños y de aportar al destino con alojamientos de mayor calidad que ofrezcan una experiencia integral al visitante. Con el auge del turismo gastronómico y el interés creciente por vivencias más auténticas, Aquamare vio la oportunidad de desarrollar un espacio diferente: una experiencia integral que combina comodidad, servicio y una inmersión en la gastronomía local.

“Desde ProColombia estamos comprometidos con impulsar la identidad isleña en los mercados internacionales. La gastronomía ha demostrado ser una herramienta poderosa para diferenciar destinos, y proyectos como los de Aquamare y Sol Caribe Campo nos permiten mostrarle al mundo un San Andrés auténtico, sostenible y lleno de historias que se cuentan a través de sus platos. La promoción internacional de estas iniciativas fortalece la economía local y enriquece la experiencia de los viajeros”, afirmó Carmen Caballero, presidenta de ProColombia.

En su propuesta culinaria, el hotel exalta los sabores y productos de la isla. Entre sus novedades se encuentra “Round di land”, una línea de cócteles inspirados en los sabores tradicionales sanandresanos.

Esta propuesta reúne ocho preparaciones únicas, entre ellas un cóctel elaborado con fruta de pan, un ingrediente originario del sudeste asiático que se ha arraigado en la cultura del archipiélago. Su sabor neutro es una mezcla entre plátano y yuca frita, lo que lo convierte en un producto versátil muy aprovechado por los cocineros locales. Otro cóctel insignia está hecho a base de hidromiel, un fermento de miel cultivada en la isla, al que se le añade ron y agua de garbanzos para crear una espuma que ofrece una experiencia sensorial al comensal.

También se destaca un cóctel de mango, elaborado con frutos cultivados por un agricultor local que produce 15 variedades diferentes en su finca en Providencia. El acceso al producto permite realizar un proceso de congelamiento y, posteriormente, iniciar la destilación para la elaboración del cóctel.

Además de su carta de coctelería, Aquamare ofrece platos típicos como pan hecho con leche de coco y empanadas de cangrejo, una preparación autóctona de la isla. Sin embargo, debido a que el cangrejo tradicional se encuentra en vía de extinción, el hotel ha optado por una alternativa sostenible: la jaiba fresca, un producto que conserva el sabor característico y contribuye a la preservación de la especie local.

“Queremos que los visitantes aprendan de nuestra gente y comprendan el valor de nuestros sabores. Yo quiero que la gente, a través de nuestro menú, conozca lo que para mí es importante: nuestra cultura”, explica Valeria Medina, jefa de alimentos de Aquamare.

Tradición que se sirve con orgullo isleño

La preservación de los sabores tradicionales también es un compromiso compartido por los cocineros locales. En Sol Caribe Campo, el chef Geser León, quien llegó a la isla en los años noventa y desde entonces ha dedicado su carrera a rescatar la esencia de la cocina típica, ha trabajado en distintos proyectos turísticos promoviendo el uso de ingredientes autóctonos como la fruta de pan y el achiote, una infusión de semillas de achiote en aceite de coco que aporta un sabor único a cada plato, además del orégano y la albahaca cultivados en la región.

La gastronomía implementada en la cadena hotelera no solo abarca la comida, sino también expresiones culturales que forman parte de la identidad isleña, como la música y la danza tradicional. Entre ellas destaca el calipso, uno de los géneros musicales y de baile más representativos del Caribe colombiano, acompañado con sus instrumentos como la mandolina, un instrumento de cuerda utilizado en la música tradicional isleña.

Esta integración entre cultura y cocina se refleja también en su propuesta gastronómica. Entre los platos más emblemáticos se encuentra el rondón, una preparación que combina tubérculos, mariscos y especias locales, y que hoy es considerada un símbolo de la identidad sanandresana. Asimismo, sobresalen las tortas de auyama y de banano elaboradas con dulce de coco, además de la albahaca, un ingrediente esencial en la cocina isleña. Aunque existen más de 150 variedades de esta planta en el mundo, en la isla se cultiva una especie única y autóctona que se utiliza en múltiples preparaciones.

“Es gratificante ver cómo los turistas, tanto nacionales como internacionales, llegan con interés por nuestra gastronomía y cultura. Cada vez hay mayor acogida, y eso nos motiva a seguir preservando nuestras tradiciones desde la cadena Sol Caribe”, señala Geser León, chef del hotel Sol Caribe Campo.

Las tradiciones como valor agregado en la oferta turística

El impulso de la gastronomía en San Andrés se ha convertido en un eje fundamental para fortalecer la identidad cultural y diversificar la oferta turística del archipiélago. A través de propuestas que conectan los hoteles locales con el turista, se contribuye a la economía de la isla, donde se genera empleo y se posiciona como un destino de turismo sostenible y con propósito.

“San Andrés es mucho más que un destino de sol y playa. Queremos que el mundo conozca su gastronomía, su idioma, su gente y todo lo que hace única a esta isla. Cada plato, cada ritmo y cada historia reflejan la esencia de un territorio que ha sabido conservar sus raíces mientras avanza hacia un turismo más sostenible y auténtico”, señala Carmen Caballero, presidenta de ProColombia.

Este trabajo conjunto entre el sector hotelero, los productores locales y las comunidades que conservan las tradiciones de la isla consolida a la cocina sanandresana no solo como una expresión cultural, sino como un desarrollo que preserva lo cultural y fortalece su sostenibilidad.


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