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Moñitos. Los campesinos de esta localidad costanera no salen de una plaga cuando les llega otra. Aún no se controla en los cultivos de plátano la presencia de Colaspis hypochlora cuando ayer se evidenció la presencia de un insecto chupador que afecta las plantas y en especial la fruta de guayaba dulce y guayaba de manzana.

Por parte de la Alcaldía de Moñitos, el profesional Nelson Ávila recorrió varias zonas afectadas con esta problemática entre ellas: Unión de Broqueles, Nuevo Oriente, Bajo Limón y el casco urbano de Moñitos.

Según el profesional, el insecto es conocido como diaphorina, chupadores de savia de la familia, Liviidae. Ávila explicó que es difícil controlar esta plaga con aspersiones con bomba, porque esta segrega una sustancia que impide que los productos entren a hacer control.

Por lo anterior, el técnico agropecuario recomienda hacer un lavado en el tallo o donde halla la afectación porque este tipo de insecto termina acabando con la planta, sea grande o pequeña.

Antes se le conocía como ‘palomilla’ y atacaba a los cultivos de papaya. De acuerdo con lo expresado por Ávila, que en sus visitas a las parcelas aprovecha para intervenir las plantas y hacer control de la plaga, su propagación se puede atacar utilizando un trapo viejo o panola humedecida con una mezcla de agua con detergente en polvo y ajo. (Por 20 litros de agua una taza de detergente con tres cabezas grandes de ajo).

Con estas acciones ya se han logrado recuperar varias plantas afectadas por este insecto. El profesional de la Secretaría de Desarrollo Económico de Moñitos invita a la comunidad afectada llamarlo al  3207075800.

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