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Bogotá. Colombia ha experimentado en los últimos 2 años un aumento significativo en la tasa de inflación, que, a pesar de venir en una senda de disminución, esta se ha visto estancada en los últimos dos meses de análisis; es decir, mayo y junio.

Han sido varios los factores: por un lado, el aumento de los precios de los alimentos y los combustibles, y por otro, las interrupciones en la cadena de suministro global que han afectado los costos de importación, lo que resulta en la reducción el poder adquisitivo de los consumidores y el costo de vida.

En respuesta, el Banco de la República de Colombia ha incrementado las tasas de interés para intentar controlar la inflación, y aunque esta medida es necesaria para estabilizar los precios, también ha resultado en un mayor costo de financiación.

Los préstamos personales, hipotecarios y comerciales se han vuelto más caros, lo que puede desacelerar el crecimiento económico y afectar la inversión empresarial.

Gestión financiera

Por lo anterior, la gestión financiera se vuelve un tema vital para los hogares, ya que es prioritario mantener el poder adquisitivo, para ello, el experto en finanzas Andrés Felipe Jiménez Cortés de la Fundación Universitaria Konrad Lorenz recomienda:

  1. Revisar y ajustar el presupuesto: Llevar un control detallado de los gastos para identificar donde se puede eliminar gastos innecesarios. Para ello, es importante distinguir entre las necesidades y deseos para poder determinar qué es lo esencial.
  2. Ahorro inteligente: Tener tranquilidad es esencial y para ello lo recomendable es tener un fondo de emergencias para que en el caso de cualquier imprevisto poder tener recursos para reaccionar y no depender de un tercero.
  3. Inversiones estratégicas: Es estos momentos de alta incertidumbre lo recomendable es revisar inversiones en renta fija, que si bien es cierto el retorno es bajo, los recursos que en él se invierten tienen mayor seguridad que en la renta variable.
  4. Reducción de deudas: Lo que siempre recomiendo a los hogares es disminuir el pago de las deudas, en lo posible realizar abonos a capital en aquellas con mayor tasa de interés e incluso llamar a las entidades financieras para refinanciar las deudas con menores tasas.
  5. Educación financiera: Mantenerse informado y educado sobre temas financieros y nuevas oportunidades, lo anterior, ayudará a tener una mejor perspectiva de la economía y tener mayor poder de negociación al momento de realizar movimientos financieros.

La gestión financiera estratégica incluye la reducción de deudas, el refinanciamiento de préstamos a tasas más bajas cuando sea posible y la priorización del pago de deudas con intereses altos. Esto reduce la carga financiera y los costos asociados a la deuda en un entorno de altos intereses.

Identificar y eliminar gastos innecesarios ayuda a vivir dentro de los medios disponibles, evitando la acumulación de deudas costosas.

 

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