Cuatro razones para que las empresas inviertan en bitcoin y cripto activos digitales
Redacción. Latinoamérica se ha distinguido como una de las regiones más destacadas para el Bitcoin y los activos digitales a nivel mundial. A principios de 2025, aproximadamente 57,7 millones de personas poseían o utilizaban alguna forma de moneda digital, lo que representa una tasa de adopción del 12,1% en toda la región. La demanda de una economía digital es más pronunciada que nunca y este nuevo ecosistema presenta a las empresas latinoamericanas una oportunidad para avanzar en sus objetivos financieros, optimizar sus operaciones comerciales y traer más oportunidades a la región.
El auge del Bitcoin y las criptomonedas en Latinoamérica es una respuesta a las cambiantes demandas financieras y realidades económicas más que una mera tendencia especulativa. A la cabeza de esta revolución digital se encuentran naciones como Brasil, donde el 16,7% de la población posee cripto activos; Argentina, donde el 18,2% de la población las posee; y Colombia, donde el 14% de la población ha comprado activos digitales. Muchas personas y empresas están recurriendo a los cripto activos digitales como consecuencia de la inestabilidad económica, la inflación y el deseo de realizar transacciones transfronterizas más eficaces.
“Las empresas en Latinoamérica tienen una oportunidad única para comprender y capitalizar el potencial revolucionario de Bitcoin, stablecoins y las criptomonedas, dado que ofrecen ventajas significativas para las operaciones, los pagos y para llegar a las comunidades desatendidas, además de oportunidades de inversión. Ser pionero en este camino es estratégicamente necesario para el crecimiento a largo plazo; ignorarlo ya no es una opción”, explicaWill Hernández, Gerente de Desarrollo de Negocios para Latam en Bitfinex.
Oportunidades clave para las empresas latinoamericanas
Inclusión financiera y nuevos segmentos de clientes: Bitcoin y las criptomonedas proporcionan un vínculo vital con los servicios financieros, ya que aproximadamente el 70% de las personas en Latinoamérica carecen o tienen un acceso inadecuado a la banca. Al incorporar este tipo de productos, las empresas pueden aprovechar este mercado considerable e infrautilizado y fomentar una mayor participación en la economía digital.
Remesas y pagos transfronterizos eficaces: Los métodos de pago transfronterizos convencionales suelen caracterizarse por costes exorbitantes y largos periodos de tramitación. Bitcoin, las stablecoins e incluso algunas soluciones basadas en blockchain podrían reducir significativamente estos obstáculos, permitiendo transacciones internacionales más rápidas y asequibles. Países como México ya utilizan stablecoins con este fin, lo que resulta especialmente pertinente para una zona que depende en gran medida de las remesas.
Cobertura contra la inflación y preservación del valor: Bitcoin y los cripto activos, especialmente las stablecoins, ofrecen una poderosa herramienta a las empresas para salvaguardar su capital y protegerse de las presiones inflacionistas en economías que sufren una devaluación de su moneda. Esta utilidad queda demostrada por la experiencia de Argentina, donde las compras de activos digitales aumentaron cuando la inflación superó el 100%.
Finanzas descentralizadas (DeFi): Esta industria emergente y de rápido crecimiento proporciona a las empresas latinoamericanas acceso a servicios y productos financieros alternativos, incluidos seguros, préstamos y créditos, a menudo a precios más asequibles y con mayor transparencia que las finanzas tradicionales.
Un ejemplo de cómo las empresas han adoptado Bitcoin y las criptomonedas en sus negocios es Méliuz, una destacada empresa de tecnología financiera de Brasil, que ha hecho historia al convertirse en la primera empresa que cotiza en bolsa en incorporar formalmente Bitcoin en su estrategia de tesorería, con el objetivo de mejorar el valor a largo plazo para los accionistas. Esta decisión estratégica ya ha dado resultados positivos, con un impresionante aumento del 116% en el precio de sus acciones tras el anuncio en marzo.
El audaz movimiento de Méliuz pone de relieve la creciente tendencia mundial de las empresas a explorar el Bitcoin y los cripto activos como un componente central de sus planes financieros, posicionando a la empresa como un punto de referencia para la futura adopción de Bitcoin como reserva de valor.