Consejos para que los microempresarios y las comunidades construyan una buena salud financiera
Bogotá. Si bien es cierto que cada año los microempresarios y sus familias se enfrentan a temas como el aumento en el costo de vida, de las materias primas y a diferentes imprevistos que impactan de forma cotidiana las finanzas del hogar y de los negocios, tomar la decisión de dar el primer paso para ahorrar puede hacer la diferencia en el futuro y, además, contribuir a la construcción de bienestar y de una buena salud financiera.
Aunque con frecuencia se cree que para ahorrar cada mes son necesarias significativas cantidades de dinero, existen productos de ahorro que desde $0 permiten dar los primeros avances para iniciar la construcción de un hábito que, a futuro, será el soporte de metas de emprendimiento y de propósitos personales y familiares como, por ejemplo, la educación de los hijos y el mejoramiento de las condiciones de vivienda o de la unidad productiva.
Lina Méndez, gerente de Captaciones de Bancamía, comenta que una de las claves para ahorrar, así sea con muy poco dinero, es hacerlo de forma constante y manteniendo la disciplina del ahorro. Cuando esta se logra, se puede ir creciendo de forma progresiva, realizando pequeños incrementos en los montos (diarios, semanales o mensuales).
“A esto se suma tener claros los propósitos u objetivos del ahorro, los cuales deben ser puntuales y también alcanzables. Con esto claro, es necesario iniciar con la elección del tipo de producto para ahorrar: puede ser un Depósito de Bajo Monto, que se puede abrir desde $0; una Cuenta de Ahorro Transaccional, desde $20.000; una de Ahorro con Propósito, para formar disciplina con compromiso de ahorro mensual; o también en Bancamía tenemos un producto para incentivar el ahorro en los niños (Grandes Soñadores). Además, están los CDT, que se pueden abrir desde $50.000, y la cuenta de alta rentabilidad ‘Rentaplus’ (con buenas tasas dependiendo del saldo)”, explica Méndez.
En el Día Mundial del Ahorro (que se conmemora cada 31 de octubre), Bancamía, entidad de la Fundación Microfinanzas Bbva, comparte algunas recomendaciones para que los microempresarios y también todos los miembros de la familia, incluidos los niños, avancen en la construcción de un adecuado manejo de sus finanzas:
- El ahorro como hábito, no como sacrificio: este hábito debe empezar por casa guardando parte de los ingresos de forma periódica y no se debe convertir en un sacrificio, ya que el ahorro debe ser visto como un hábito positivo que debe alimentarse de forma constante para mejorar la salud financiera de familias y negocios.
- Ahorrar con propósitos claros: una de las claves para consolidar hábitos de ahorro duraderos consiste en hacer un listado de propósitos (como educación, ampliación de un negocio, mejoramiento de vivienda, vacaciones, imprevistos, entre otros) con el fin de conocer cuántos recursos son necesarios para cada uno de ellos y, además, cuánto tiempo se requerirá para lograr contar con la totalidad del dinero.
- El ahorro sí puede rentar: los productos de ahorro de alta rentabilidad se han convertido en una práctica opción que genera valor y que permite que las personas inviertan una parte de sus ingresos mensuales. También están los CDT que ofrecen rentabilidades positivas y seguras por mantener un monto de dinero guardado por un período de tiempo establecido con la entidad financiera.
- Hay que conocer bien los gastos: elaborar un presupuesto y llevar un control detallado de los gastos permitirá establecer prioridades, hacer algunos recortes y también, evitar compras innecesarias e impulsivas. Esta práctica es clave para que las personas puedan construir su independencia financiera y desarrollar un control responsable de los recursos.
En el mercado existen productos de ahorro que se pueden abrir, administrar y rentabilizar de manera sencilla, rápida y con buenos retornos, sin necesidad de tener altas cantidades de dinero: lo más importante es empezar a construir el hábito. En entidades como Bancamía, que cuenta con una diversa oferta de productos de ahorro y CDT, los microempresarios y las comunidades pueden acceder a educación financiera gratuita para avanzar en la construcción de su salud financiera.