Colombia brilla con valiosa donación al Museo de Alimentación y Agricultura de la FAO
Roma, Italia. El Museo y Red de Alimentación y Agricultura (FAO MuNe) de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) fue inaugurado por el presidente de la República Italiana, Sergio Mattarella, y el director general de la FAO, QU Dongyu, lanzando una nueva y emocionante experiencia en Roma que invita al público a explorar la relación entre la alimentación, la agricultura y la humanidad mientras descubre 80 años de trabajo de la FAO.
Abierto al público y con una superficie aproximada de 1300 m², FAO MuNe es una plataforma educativa dinámica que reúne el patrimonio y las tradiciones agrícolas, la ciencia y la innovación. Ubicado en la sede de la FAO, entre el Circo Máximo de Roma y el Coliseo, FAO MuNe es una experiencia informativa, interactiva e inmersiva diseñada para hacer accesibles a todos los temas relacionados con la alimentación, la agricultura y la sostenibilidad. Su lema “Explorar. Aprender. Actuar” convierte la misión de la FAO de erradicar el hambre y la malnutrición en un llamado a la acción, inspirando a los visitantes a transformar el conocimiento en acción.
La inauguración tuvo lugar con motivo del Día Mundial de la Alimentación y del 80º aniversario de la FAO, con el apoyo del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación Internacional de Italia, y la participación del presidente de Italia.
“Nos enorgullece inaugurar el Museo y Red de Alimentación y Agricultura”, declaró el director general de la FAO, Qu Dongyu. “FAO MuNe ofrece una nueva forma de compartir el mandato de la FAO con el mundo a través del conocimiento, la cultura y la innovación, conectando e inspirando a públicos globales”, agregó.
El Museo MuNe es un espacio dedicado al intercambio cultural y la innovación. Alberga más de 1,5 millones de volúmenes: una colección física y digital de libros raros e importantes de todo el mundo, incluida la histórica colección de David Lubin, que abarca más de 500 años de publicaciones y documentos agrícolas.
En el corazón de FAO MuNe se encuentra una colección de arte de más de 60 piezas donadas por unos 40 Miembros de la FAO de las seis regiones del mundo donde trabaja la FAO, cada una compartiendo la historia de su tierra y su gente.
La donación de Colombia
Colombia brilla en la inauguración del Museo FAO MuNe en Roma con piezas emblemáticas que tejen identidad y conocimiento ancestral
En la inauguración del FAO MuNe Colombia dejó una huella visible con la entrega de una réplica del poporo quimbaya, una ruana cundiboyacense, piezas artesanales representativas de Boyacá y la Sierra Nevada de Santa Marta, y un traje típico del Sanjuanero huilense.

Colombia brilló en la apertura del nuevo museo de la FAO con donación de poporo quimbaya, ruana y cerámicas boyacenses, traje típico sanjuanero y piezas de la Sierra Nevada de Santa Marta.
La réplica del Poporo de Frutas es una obra en oro de 24 quilates creada por el maestro orfebre Enrique Hurtado, quien utilizó las mismas técnicas ancestrales empleadas por la cultura Quimbaya hace más de 1.500 años. Esta pieza rinde homenaje a la relación sagrada entre la alimentación, la naturaleza y la espiritualidad en las culturas originarias de Colombia. Presentada por la embajadora Jhenifer Mojica, simboliza el diálogo entre conocimiento ancestral y cuidado de la tierra. En sus palabras: “Colombia en el Museo de la Alimentación y la Agricultura de la FAO, que nos invita a reflexionar sobre la conexión entre la tierra, la gente y la cultura, parte de nuestra identidad”.
Desde Boyacá, la ruana creada por el taller Tejidos Rebancá -en el municipio de Iza- rinde tributo al vestuario campesino andino. Tejida 100 % con lana de oveja criolla, hilada a mano en telar horizontal, representa la identidad de los campesinos boyacense. Fue concebida como un “mapa” que articula oficios, paisajes y alimentos ancestrales andinos para celebrar el encuentro entre agricultura, comunidad y naturaleza.
El aporte boyacense se complementa con la colección de cerámica ‘A Cielo Abierto’, que exalta la quema tradicional sin horno, una técnica en vía a desaparición que conservan las últimas ceramistas de Tuaté -vereda ubicada entre los municipios de Tutazá y Belén- Isabel García, Matilde Ayala y Dioselina Díaz. “Esta colección de 10 piezas, modeladas en arcillas rojas y terracotas, son memoria viva del oficio y la transmisión de saberes, un homenaje al barro que arde sin encierros, al fuego que danza con el viento”, resaltó Daniela Assis Fierro, gestora social de Boyacá.
El traje típico sanjuanero, emblema del Festival Folclórico y Reinado Nacional del Bambuco, se consolidó a mediados del siglo XX junto a la coreografía del Sanjuanero Huilense. Las prendas que lo integran condensan el oficio artesanal, el paisaje del Magdalena y la identidad campesina. “Este reconocimiento exalta el folclor colombiano y proyecta al Huila como un territorio que comparte con orgullo su identidad y tradición ante el mundo”, afirmó el gobernador del departamento, Rodrigo Villalba.
Finalmente, desde la Sierra Nevada de Santa Marta, Colombia entregó al MuNe dos piezas profundamente simbólicas: una que evoca las montañas, el cuerpo y el ciclo del agua, y otra en tejido que representa unión, fuerza y fertilidad. La entrega, realizada a través de la Embajada de Colombia ante la FAO, se presentó como un símbolo de responsabilidad frente a la alimentación “como base fundamental de la vida” e invitó a unir a Roma, a los pueblos indígenas del mundo y a la Sierra, “corazón del mundo”. El gesto reafirma la diversidad de 115 pueblos indígenas y el compromiso del Gobierno con sus derechos territoriales, subrayando que superar el hambre exige una acción conjunta para un desarrollo sostenible.

Las prendas que integran el traje típico sanjuanero condensan el oficio artesanal, el paisaje del Magdalena y la identidad campesina.
La donación de estas piezas fue posible gracias a Artesanías de Colombia y el propio maestro Hurtado, la gobernación de Boyacá, la gobernación del Huila y la Comisión Nacional de Territorios Indígenas. A partir de ahora, estas obras harán parte de la exposición permanente del Museo de la Agricultura de la FAO, el cual se suma a los patrimonios culturales de la ciudad eterna.
Por qué es importante MuNe
La comida es más que un sustento: representa cultura, identidad y diplomacia. FAO MuNe ofrece un espacio para el aprendizaje, el diálogo y la colaboración, vinculando el patrimonio agrícola con la innovación contemporánea.
Su Laboratorio FoodS, la “cocina del mundo”, está totalmente equipado y albergará talleres, demostraciones de cocina, espectáculos interactivos y charlas de expertos que exploran las tradiciones culinarias globales, la sostenibilidad y las soluciones innovadoras. Al conectar instituciones culturales, universidades y colaboradores de todo el mundo, el museo fomenta la concienciación y el intercambio sobre la seguridad alimentaria y la cooperación mundial.
Como red global, FAO MuNe conecta instituciones, socios y comunidades, creando un centro global de colaboración y diálogo que vincula las experiencias locales con el conocimiento global.
Uno de los espacios más significativos del Museo –la sala dedicada a los Pueblos Indígenas– recuerda a los visitantes que el conocimiento tradicional, el respeto por la naturaleza y los valores comunitarios son esenciales para construir sistemas agroalimentarios más sostenibles y resilientes.
Guiado por los Cuatro Principios de la FAO —mejor producción, mejor nutrición, mejor medio ambiente y una vida mejor— FAO MuNe refleja el Marco Estratégico de la Organización y su alineación con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
FAO MuNe recibirá visitantes de lunes a sábado a partir del 20 de octubre de 2025. Las reservas pueden hacerse directamente en su sitio web o contactando con FAO-Museum@fao.org. Y también cuenta ya con la app MuNe, disponible en todos los idiomas: https://discover-fao-mune.orpheo.app/.