A través de proyectos de eficiencia y sostenibilidad, Cargill reducirá 10% los gases de efecto invernadero
Cali, Valle del Cauca. Cargill reafirma su compromiso con la agricultura sostenible en Colombia, impulsando iniciativas que integran prácticas regenerativas y tecnologías verdes para abordar los desafíos climáticos y sociales que enfrenta el sector agrícola. En un país con más de 20 millones de hectáreas cultivables, Cargill se posiciona en el centro de la cadena de suministro de alimentos, lo que brinda la oportunidad de crear un sistema alimentario más sostenible y resiliente para contribuir con un mundo alimentario más seguro.
La incorporación de tecnología verde ha sido un elemento clave en el éxito de estas iniciativas. Estas innovaciones permiten una producción más limpia y eficiente, mejorando la sostenibilidad a largo plazo. Por ello, Cargill cumple un su papel en el centro de la cadena como proveedor mundial de alimentos, cultivando y transportando productos de manera segura, responsable y sostenible para alimentar a una población en constante crecimiento.
Cargill evalúa el impacto de estas prácticos y resalta en sus informes de ESG (Ambiental, Social y Gobernanza) y en el Proyecto de Divulgación de Carbono (CDP) avances significativos en la disminución de emisiones, el ahorro de agua y la eficiencia energética. En su sector de proteínas, la compañía, dispone de un estándar operativo para la gestión de recursos naturales, además de un lineamiento de gestión energética basado en la norma ISO 50001.
Actualmente en Colombia, Cargill, tras la evaluación de sus inventarios de gases de efecto invernadero (GEI), ha logrado una reducción del 10% en sus impactos en comparación con el año natural 2022. Este avance refleja el compromiso de la empresa con la mejora continua y garantiza que pueda sostener su crecimiento futuro de manera segura, responsable y sostenible.
“En Cargill, creemos que la agricultura sostenible es el futuro. Nuestro compromiso con los agricultores colombianos y con el medio ambiente está guiado por un enfoque integral que combina innovación, tecnología y responsabilidad social. Juntos estamos creando un mundo alimentario más seguro”, afirmó Ramón Sosa, director de Relaciones de Gobierno Cargill en Región Andina.
Acciones concretas para un impacto duradero
En línea con su objetivo de alimentar al mundo de manera segura, responsable y sostenible, la empresa ha definido prioridades claras en cuatro áreas fundamentales para la sostenibilidad global: clima, tierra, agua y personas.
Cargill ha implementado estrategias para promover la agricultura regenerativa, apoyando a los agricultores en la adopción de prácticas que no solo incrementan la productividad, sino que también minimizan el impacto ambiental. A nivel global, Cargill ha reducido sus emisiones anuales de CO2 en aproximadamente 300.000 toneladas métricas, reportadas durante el año 2022, lo que equivale a retirar 67.000 automóviles de la carretera durante un año.
Tierra y agua
Cargill adopta un enfoque integral para el uso sostenible de la tierra, con el objetivo de contribuir a la seguridad alimentaria, abordar el cambio climático, mitigar el agotamiento de los recursos y frenar la pérdida de biodiversidad, mientras satisface las necesidades de los agricultores. En este contexto, la gestión eficiente de los recursos hídricos se erige como un pilar fundamental de su estrategia.
Para alcanzar estos objetivos, la empresa ha implementado a nivel global tecnologías de tratamiento de agua para su reutilización, así como sistemas de ahorro que buscan asegurar un impacto positivo en las cadenas de suministro y en las comunidades locales. Este año, los programas de agricultura regenerativa en sus cadenas de suministro han logrado aumentar en aproximadamente 3,400 millones de litros el volumen de agua, mejorando la calidad de este recurso y reduciendo más de 60 toneladas métricas de contaminantes.
Personas
Para Cargill, las personas son lo más importante. La compañía se dedica a mejorar los medios de vida de los agricultores, sus familias y las comunidades rurales mediante iniciativas de desarrollo económico, voluntariado y programas de diversidad, equidad e inclusión.
Un ejemplo representativo de estas iniciativas es el programa de Patios Productivos en Villagorgona, Valle del Cauca. A través de esta iniciativa, se ha capacitado y brindado apoyo técnico a los habitantes para transformar los patios de sus hogares en huertas productivas, reconectándolos con su tradición agrícola.
También, Cargill ha introducido un innovador programa que capacita a familias campesinas en el manejo de la bioseguridad en la producción de proteína animal, con el objetivo de promover prácticas que garanticen la seguridad alimentaria. En este contexto, la empresa se ha fijado la ambiciosa meta de formar a más de 10 millones de agricultores en prácticas agrícolas sostenibles en todo el mundo para el año 2030. De este modo, busca fortalecer la seguridad alimentaria global mientras impulsa la sostenibilidad en la agricultura.
En este contexto, es importante resaltar que Cargill, a través de su marca Pollos Bucanero S.A., ha recibido el Sello de Sostenibilidad Avícola en su categoría más alta. Este distintivo reconoce a la organización por desarrollar y cumplir con prácticas sostenibles en los ámbitos ambiental y social. Un ejemplo notable es su planta de beneficio en Villagorgona, que se abastece en un 30 % de energía solar y, desde 2020, ha logrado reducir la emisión de 10,071 toneladas de CO2.
En conclusión, Cargill se presenta como un socio comprometido con el medio ambiente, reconociendo la sostenibilidad como un imperativo empresarial. A través de su esfuerzo continuo, la compañía busca ser el aliado más confiable para sus clientes en los sectores alimentarios, agrícolas, financieros e industriales. Su objetivo es contribuir a la creación de un sistema alimentario global más sostenible, resiliente y accesible para todos.