Cerro Matoso entregó tierras a comunidades vecinas, ya van 1000 hectáreas
Montelíbano. A través del programa de Fondo de Tierras, Cerro Matoso entregó un predio de 113,4 hectáreas a las comunidades del cabildo La Libertad y de las Juntas de Acción Comunal (JAC) de Puerto Colombia y de Bocas de Uré, asentadas en el municipio de San José de Uré en el departamento de Córdoba.
Con el predio Nuevo Horizonte, Cerro Matoso ha entregado 1.000 hectáreas de tierras a comunidades indígenas, afro y campesinas vecinas a su operación.
Este hito, que se convierte en referente entre las empresas minero-energéticas, así como para el sector empresarial colombiano, es resultado del diálogo permanente y el trabajo en conjunto entre Cerro Matoso y sus vecinos, y están enmarcadas en los procesos de consulta previa y de participación y socialización llevados a cabo entre la empresa y las comunidades.
Durante el evento de entrega oficial, Ricardo Gaviria, presidente de la empresa, afirmó: “Nos llena de satisfacción contribuir desde Cerro Matoso a lograr un hito histórico para las comunidades vecinas a nuestra operación con la entrega de 1.000 hectáreas que están aportando a su desarrollo económico, social y cultural. Somos conscientes del valor que tiene para ellas el acceso a tierras productivas que contribuyen a su autonomía, unidad, seguridad alimentaria y sostenibilidad. Estos procesos nos demuestran una vez más el valor de seguir consolidando los ejercicios de diálogo entre las empresas y sus vecinos”.
Por su parte, Estela Hoyos, representante legal del Cabildo La Libertad de Puerto Colombia señaló: “En este momento se siente una gran satisfacción y un gran logro; lo que la comunidad más anhelaba era tener una tierra propia. Tenemos pensado dividirnos por núcleo familiar para que cada quien tenga su proyecto en su propia parcela y cada quién le va a poner el empeño a la tierra que siempre hemos anhelado”.
Específicamente la adquisición del predio Nuevo Horizonte, que beneficiará a 127 familias, contempló la unión, el diálogo y la concertación entre el cabildo y las dos JAC en búsqueda de poder acceder, de forma mancomunada, a una mayor extensión de tierra.

Una de las viveristas de Bocas de Uré donó un árbol de caoba que fue sembrado en el predio.
“Nosotros como comunidad no teníamos tierra donde ejecutar los proyectos productivos. Para nosotros es una alegría contar con un terreno propio donde podemos desarrollar nuestras actividades, como la ganadería y proyectos de pancoger”, afirmó José Manuel Arrieta, presidente de la JAC de Bocas de Uré.
Finalmente, Yaimer Arcia, presidente de la JAC de Puerto Colombia expresó: “Estamos muy agradecidos primero que todo con Dios y segundo con Cerro Matoso por apoyarnos. Esto es algo muy grande para nosotros para seguir ejecutando nuestros proyectos productivos para el bien de nuestras familias”.